domingo, 8 de mayo de 2016

La madre


Sorprende ver el revuelo que el día de la madre representa en Ambato.  Flores, globos y regalos pasean por las calles para hacérselos llegar. Las tiendas hacen rebajas y sus horarios se amplían, todo para que la mama no se quede sin su regalo. Hablamos de un detalle de un día para recompensar días, meses, años y hasta décadas de trabajos, cariños y atenciones.
Desde aquí mi propuesta es que les hagamos un regalo más largo y comprometido, que mejoremos sus vidas, que las hagamos disfrutar de sus derechos lo que supone un compromiso más justo y que ellas merecen.
Según las estadísticas de INEC, cuantos más hijos tiene una mujer más violencia intrafamiliar sufre. Este dato nos responsabiliza a todas y todos que somos o hemos sido testigos de estas violencias y que debemos conseguir parar, creando una sociedad más igualitaria que ponga valor a los cuidados que ellas nos prodigan. 
Las mujeres son las pobres del mundo. Esta realidad no es ecuatoriana solamente, en Estados Unidos, ellas tienen la mitad de la pensión en su vejez que ellos. Los cuidados que nos dan de niñas o niños, los que dan a sus padres o familiares las alejan del mundo laboral impidiéndolas pagarse un seguro adecuado para en su vejez conseguir una dignidad que viene ligada a una independencia económica.
Esos mismos cuidados que en muchos casos las enferman, las impiden aumentar su cualificación académica, las obligan a trabajar menos horas, a no aceptar ascensos, a no tomar cursos para mejorar, no son adecuadamente reconocidos por ninguna sociedad, siendo múltiples las empresas que pagan menos a las mujeres por el mismo puesto de trabajo. Además la falta de cualificación las lleva a trabajos peores con menos sueldos.
Según datos recientemente publicados en Colombia y Estados Unidos los cuidados representan el 20 % de su producto interior bruto. En Ecuador casi seguro que hoy la cifra es muy parecida. 
Desde aquí les pido que hagamos el mejor regalo a las madres: una VIDA sin violencia y en igualdad 



Publicado en La Hora en mayo de 2015 

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